Durante el foro 8 del Parlamento Abierto para discutir la reforma eléctrica enviada por el poder Ejecutivo, especialistas hubo confrontación por los resultados de la reforma energética aprobada en el sexenio de Enrique Peña Nieto.
En el foro “¿En qué condiciones se aprobó la Reforma de 2013?”, los defensores de la reforma de Peña Nieto argumentaron que la regulación ha funcionado y propiciado inversiones, mientras que los detractores de ese cambio sostuvieron que se trató de una reforma “entreguista” avalada a espaldas de la nación.
Carlos Meza Viveros, abogado y asesor independiente, quien ha litigando en contra de la reforma de Peña Nieto, aseguró que esa “grotesca reforma”, “cuyo objetivo fue el de desmantelar y privatizar las áreas estratégicas de la nación en beneficio de las empresas internacionales”, se aprobó en San Lázaro en pocos minutos sin un debate real, y en los congresos locales en menos de 10 minutos, lo que culminó “en una entrega soez de una de las más importantes áreas estratégicas de nuestro país a manos extranjeras”.
En respuesta, Ramses Pech, asesor de la industria eléctrica y experto en hidrocarburos y energía geotérmica, sostuvo que antes de la reforma de 2013, “había un caos en la industria energética”.
Explicó que antes de esa modificación constitucional, la industria eléctrica mexicana dependía en 40% de los ingresos petroleros, mientras que a noviembre de 2021 dependemos en 18%, en tanto que antes de la reforma la inversión extranjera directa en el sector energético era de 3% del mercado, y actualmente es del 20%.
“Entonces la reforma sí sirvió, y destacar que hoy a Pemex y CFE les damos 1 billón de pesos. Para 2030 necesitaremos entre 2 y 2.2 billones de pesos, ¿de dónde va a salir esa cantidad de dinero?, la reforma de 2013 sí funcionó, pero la pregunta es qué vamos a hacer de cara al futuro, estamos a tiempo de lograr la transición energética solo es cuestión de ponernos de acuerdo”, apuntó.
En su oportunidad, José Romualdo Hernández, coordinador de Proyectos de Inversión y Vinculación de CFE, dijo que la “ignominia” de la reforma de 2013 se aprobó con una inusitada celeridad, sin debate técnico ni de contenidos como hoy se está dando.
“Hoy discutimos esta reforma de cara a la nación y estamos dando posicionamientos que van a servir para informar a la ciudadanía, enriquecer el debate público, y acercar elementos técnicos que sirva a los legisladores para enriquecer el dictamen.
“La reforma de 2013 no buscaba la mejora del sector, dicen que esta reforma es muy restrictiva, yo diría que la reforma de 2013 fue entreguista, dicen que se está estatizando la industria, no es verdad, se prioriza la economía mixta, el sector privado va a seguir presente en la industria eléctrica, entonces, la reforma presidencial es la iniciativa constitucional más trascendente de esta administración”, expresó.
Severo López Mestre, maestro en Regulación y Competencia Económica, denunció que la propuesta que impulsan la bancada de Morena y sus aliados pretende que CFE establezca sus propias tarifas, “pero no hay una sola empresa eléctrica en el planeta que establezca sus propias tarifas”. “Ni López Mateos, ni Cárdenas plantearon una reforma constitucional tan restrictiva como la que tenemos sobre la mesa”, concluyó.