
Tras la acusación del Departamento de Transporte de Estados Unidos al gobierno de México de incumplir el Acuerdo de Transporte Aéreo entre ambos países vigente desde 2015, el vicecoordinador económico del GPPAN, Héctor Saúl Téllez Hernández urgió al Ejecutivo Federal a iniciar negociaciones para evitar sanciones que afectará gravemente a la industria aeronáutica nacional.
El legislador recordó que este sábado el Departamento de Transporte de Estados Unidos emitió un comunicado donde acusa que el gobierno mexicano suspendió abruptamente el acuerdo bilateral desde el 2022 al reducir franjas horarias y obligar a empresas estadounidenses de carga a reubicar sus operaciones fuera de la Ciudad de México, bajo pretexto de remodelación del aeropuerto capitalino.
“El cambio de los destinos de los vuelos comerciales y de carga es grave entre México y Estados Unidos prácticamente las cifras dan que hay un movimiento de 40 millones de pasajeros; lo que representa alrededor de 20 a 25 mil millones de dólares y en lo relativo a los servicios de carga, al año se mueven aproximadamente 600 mil toneladas de mercancía que se traducen en un monto entre los 30 y 35 mil millones de dólares adicionales”, explicó.
Abundó que si la queja del gobierno de EEUU no se atiende rápidamente podría cumplir la amenaza de reducir el permiso de vuelos entre ambos países, lo que generará una afectación de entre 10 al 20 por ciento de los vuelos de pasajeros, lo que se traduce en una reducción de cuatro a ocho millones de pasajeros anuales.
“El capricho de trasladar vuelos comerciales y la gran mayoría de vuelos de carga al Aeropuerto Internacional Felipe Ángeles (AIFA) para tratar de hacerlo funcional no puede salir caro a todos los mexicanos, este ha sido el mayor engaño o simulación del gobierno de la transformación para darle vida artificial a este proyecto aeroportuario”, sentenció.
Téllez Hernández abundó que los efectos negativos serán el incremento de tarifas para pasajeros; pérdidas en servicios de pasajeros de unos tres mil millones de dólares; pérdidas de servicios de carga por unos cuatro mil millones de dólares; pero sobre todo, la pérdida de empleos hasta seis mil personas; así como el daño económico a líneas aéreas nacionales y la inmunidad antimonopolio que conserva Aeroméxico por su alianza con Delta Airlines.
“La incapacidad de cumplir con acuerdos internacionales, la ineficacia para proteger los intereses nacionales y a la industria aeronáutica mexicana, sumado a la falta de planeación estratégica, nos pone en un grave riesgo económico”, concluyó.