El Ministerio de Sanidad del gobierno gazatí, controlado por el Movimiento de Resistencia Islámica (Hamas), declaró este lunes la franja de Gaza zona epidémica de poliomielitis.
El Ministerio recuerda que la polio estaba erradicada en Palestina desde hace muchos años, pero que “la miserable situación” de la población como consecuencia de la “brutal agresión israelí” provocaron un empeoramiento drástico de las condiciones de vida que propiciaron esta epidemia.
En concreto menciona la privación de agua potable, la destrucción de la infraestructura de alcantarillado, la acumulación de miles de toneladas de basura, la falta de la seguridad alimentaria y la acumulación de población en lugares de desplazamiento forzado.
A estas circunstancias se suma ahora el descubrimiento de la presencia del virus que causa la polio del tipo CVPV2 en las aguas residuales de las gobernaciones de Jan Yunis y Central.
Esta epidemia de polio “constituye una amenaza para la salud de los habitantes de la franja de Gaza y de los países vecinos y un revés para el programa mundial de erradicación de la polio”, advirtió.
Las autoridades sanitarias gazatíes afirmaron que el actual programa vigente que cuenta con la colaboración de organizaciones internacionales “no será suficiente a menos que haya una intervención inmediata para poner fin a la agresión y encontrar soluciones radicales al problema de la falta de agua potable y medios de higiene personal, como detergentes, desinfectantes, reparación de redes de agua potable y transporte de toneladas de basura y desechos sólidos”.
El pasado 21 de julio las Fuerzas Armadas israelíes informaron de que pusieron en marcha una campaña de vacunación general de sus efectivos tras detectar un brote de polio en la población palestina.
El comunicado militar israelí asegura que también se están realizando gestiones para que lleguen vacunas para la población de la franja de Gaza en colaboración con organizaciones internacionales. Así, unas 300 mil vacunas contra la polio entraron en el enclave palestino desde el inicio de la guerra que bastarían para vacunar a más de un millón de gazatíes, según Israel.