La producción de alimentos ha caído 7 por ciento desde 2019, a pesar de que la autosuficiencia alimentaria es una de las líneas centrales del Plan Nacional de Desarrollo y es el primer objetivo del Programa Sectorial de Agricultura y Desarrollo Rural, sostuvo José Amadeo, líder de la Central Campesina Cardenista.
En un comunicado, mencionó que México no es ajeno a los daños que ocasiona el conflicto entre Rusia y Ucrania, sobre todo en la agricultura, ya que los países en guerra son de los principales productores y exportadores de granos y fertilizantes, lo cual ha generado escasez y encarecimiento de dichos bienes.
Durante la inauguración del 58 Congreso Agrario Nacional, expuso que las perspectivas de crecimiento del país a mediano plazo se han deteriorado, por lo que hace falta reactivar la inversión e impulsar la productividad.
Sostuvo que el gobierno se ha negado a escuchar las necesidades de los campesinos y las propuestas de sus organizaciones, que enfrentan altos costos de generación, por lo caro de los principales insumos y energéticos y falta de apoyo para mejorar la utilidad, como única alternativa de aumentar la producción.
Consideró indispensable que se rediseñe el presupuesto de apoyo al agro, abandonar la visión asistencialista y dar paso de una vez por todas a una política de Estado para el campo; se requiere “una política productiva con sentido social y una política social con sentido productivo”. Dijo que se necesita un cambio en las políticas públicas hacia las organizaciones sociales, que este año han sufrido un nuevo embate con las nuevas reglas fiscales.
