Con el objetivo de evitar que las tensiones entre Estados unidos y China deriven en un conflicto, altos diplomáticos de Estados Unidos y China mantuvieron conversaciones “francas y productivas” en Beijing donde acordaron dejar abiertas las líneas de comunicación entre ambas naciones
Daniel Kritenbrink, subsecretario de Estado para asuntos de Asia Oriental y el Pacífico, fue el funcionario estadounidense de mayor rango que visitó China el lunes desde el aumento de las tensiones entre Washington y Beijing por el derribo de un globo espía chino sobre territorio estadounidense a principios de febrero.
En aquel momento, el secretario de Estado, Antony Blinken, pospuso un viaje que tenía previsto a China, y Beijing había rechazado desde entonces los intentos de contacto oficiales, aunque dos altos funcionarios de defensa de ambas naciones interactuaron brevemente en un foro en Singapur durante el fin de semana.
El Ministerio de Relaciones Exteriores de China dijo que Kritenbrink y el vicecanciller Ma Zhaoxu “mantuvieron una comunicación franca, constructiva y fructífera sobre la promoción de la mejora de las relaciones entre China y EEUU y la gestión adecuada de las diferencias”.
Beijing dijo que reiteró su “posición formal sobre Taiwán” y otros asuntos y que las dos partes acordaron mantener la comunicación.
El Departamento de Estado agregó que los dos funcionarios mantuvieron “conversaciones francas y productivas como parte de los esfuerzos en marcha para mantener abiertas las líneas de comunicación y aprovechar la diplomacia reciente de alto nivel entre los dos países”.
La Marina estadounidense se quejó el domingo acerca de una “interacción insegura” en el Estrecho de Taiwán, después de que un buque de guerra chino se acercase a menos de 137 metros de un destructor estadounidense.
El mes pasado, un caza chino se acercó peligrosamente a un avión de reconocimiento estadounidense sobre el Mar de la China Meridional, donde Beijing comparte reivindicaciones territoriales con otras naciones.
El director de la CIA, William Burns, hizo el mes pasado un viaje secreto a Beijing, en otro indicio del interés de ambas partes en restablecer la comunicación a través de diversos canales.
Con el objetivo de evitar que las tensiones entre Estados unidos y China deriven en un conflicto, altos diplomáticos de Estados Unidos y China mantuvieron conversaciones “francas y productivas” en Beijing donde acordaron dejar abiertas las líneas de comunicación entre ambas naciones
Daniel Kritenbrink, subsecretario de Estado para asuntos de Asia Oriental y el Pacífico, fue el funcionario estadounidense de mayor rango que visitó China el lunes desde el aumento de las tensiones entre Washington y Beijing por el derribo de un globo espía chino sobre territorio estadounidense a principios de febrero.
En aquel momento, el secretario de Estado, Antony Blinken, pospuso un viaje que tenía previsto a China, y Beijing había rechazado desde entonces los intentos de contacto oficiales, aunque dos altos funcionarios de defensa de ambas naciones interactuaron brevemente en un foro en Singapur durante el fin de semana.
El Ministerio de Relaciones Exteriores de China dijo que Kritenbrink y el vicecanciller Ma Zhaoxu “mantuvieron una comunicación franca, constructiva y fructífera sobre la promoción de la mejora de las relaciones entre China y EEUU y la gestión adecuada de las diferencias”.
Beijing dijo que reiteró su “posición formal sobre Taiwán” y otros asuntos y que las dos partes acordaron mantener la comunicación.
El Departamento de Estado agregó que los dos funcionarios mantuvieron “conversaciones francas y productivas como parte de los esfuerzos en marcha para mantener abiertas las líneas de comunicación y aprovechar la diplomacia reciente de alto nivel entre los dos países”.
La Marina estadounidense se quejó el domingo acerca de una “interacción insegura” en el Estrecho de Taiwán, después de que un buque de guerra chino se acercase a menos de 137 metros de un destructor estadounidense.
El mes pasado, un caza chino se acercó peligrosamente a un avión de reconocimiento estadounidense sobre el Mar de la China Meridional, donde Beijing comparte reivindicaciones territoriales con otras naciones.
El director de la CIA, William Burns, hizo el mes pasado un viaje secreto a Beijing, en otro indicio del interés de ambas partes en restablecer la comunicación a través de diversos canales.