León volvió a empatar con el otro grande del futbol mexicano, Cruz Azul, esta vez sin goles. Después de la igualada ante América, ahora los melenudos no le permitieron a los celestes extender su buena fortuna por una jornada más.
No hubo manera de abrir el cerrojo en ningún lado. El tiempo avanzó y sólo el rostro de Ricardo Ferretti sufría estragos como si cada minuto fuera un siglo. Hubo manotazos y gritos del Tuca, que no tuvieron reflejo en el marcador.
Al 82, La Máquina y sus aficionados salieron disparados por un resorte de emociones cuando en una gran jugada, Julio César Cata Domínguez descubrió que la defensa esmeralda estaba desmantelada. El ataque celeste, sin embargo, estaba en posición fuera de juego y el tanto fue anulado para tristeza de los seguidores cementeros y enfado iracundo del entrenador Ferretti.