Por Víctor Barrera
Esta administración federal, autodenominada 4T, sigue dando muestras que no tienen idea de cómo administrar la riqueza para crear más riqueza y cada vez realizan actos que nos llevan hacia atrás y no al desarrollo tecnológico que se requiere en el país.
Ahora. Se anuncio la adquisición del 87 por ciento de la capacidad instalada para generar energía eléctrica que la empresa española Iberdrola tiene en México.
Esto que el inquilino de Palacio Nacional llamo la nueva nacionalización eléctrica, no es más que un problema mayor para el desarrollo del país, porque ante la falta de creación de riqueza por parte de las empresas productivas de México, no habrá recursos para darle mantenimiento a esta infraestructura y seguramente en un mediano plazo esta se volverá obsoleta o tendrá que aplicársele una mayor cantidad de dinero para mantener su productividades los mismo niveles que hasta ahora tiene.
El “capricho” de López Obrador costará 6 mil millones de pesos que en pesos representan 108 mil milolo0nes de pesos, si nuestra moneda se queda en 18 pesos por dólar y no sufre en los próximos años una depreciación.
Además posiblemente, condene a los mexicanos que ante la falta de mantenimiento, como sucede en el Metro de la Ciudad de México, le funcionamiento de esta infraestructura vaya disminuyendo en cantidad y calidad. Esto es que no habrá la suficiente energía eléctrica que pueda satisfacer la necesidad de los mexicanos y a su calidad será de voltaje variable, poniendo en riesgo los aparatos eléctricos, Algo similar a lo que ocurrió en la década de los 70 en el país.
También condena a muchas poblaciones a seguir padeciendo de energía eléctrica, porque no se ha iniciado la instalación del cableado para llevar a esas comunidades el energético, por lo que dudamos que esto se pueda hacer en un plazo menor a cinco años.
Otros resultados negativos será la captación de inversión privada para este sector, porque ningún empresario permitirá que su negocio este en manos del Estado, sobre todo cuando ese estado ha mostrando incapacidad de administración al seguir inyectando cantidades enrome de dinero y la CFE, sigue mostrando números rojos.
Porque los inversionistas que estaban animados a aplicar recursos en este sector, se estimaba que entrarían en estos años 15 mil millones de dólares anuales para la construcción de infraestructura y desarrollo tecnológico, lo que ahora se detendrá, porque estos inversionistas se preguntar ¿Porque la empresa, Iberdrola, de mayor importancia para generar electricidad en México, decide vender sus activos en este país? Esto generara incertidumbre entre los inversionistas.
A esto debe sumarse, la política energética que aplica esta administración, que repito es dar pasos atas, a los mexicanos poco les interesa si la energía eléctrica es creada por nacionales o extranjeros, ellos quieren energía suficiente y de calidad para desarrollar sus empresas.
En tanto el estado deberá buscar los recursos no solo para crear más empresas generadoras de electricidad, también para comprar y desarrollar la nueva tecnología, es decir mayor gasto en un país donde el crecimiento del PIB no llega ni al 2 mediocre 2 por ciento. México como los cangrejos caminaos de manera lateral o hacia atrás.
