A partir de las 7:00 horas del domingo se reanudará el servicio en el tramo subterráneo de la Línea 12 del Metro, de la terminal Mixcoac a la estación Atlalilco, luego de permanecer cerrada durante mas de un año y ocho meses tras el desplome de una trabe del viaducto elevado entre Olivos y Tezonco, una vez que concluyeron trabajos de rehabilitación y reforzamiento con una inversión de 750 millones de pesos.
En sesión del Consejo Consultivo del Metro para explicar pormenores de la reapertura y los trabajos realizados y hacer un recorrido por las nueve estaciones a lo lego de mas de 11 kilómetros, el director general del Sistema de Transporte Colectivo (STC), Guillermo Calderón Aguilera, con el titular de la Secretaría de Movilidad (Semovi), Andrés Lajous Loaeza, resaltaron que la línea reanuda el servicio con una certificación de las condiciones de seguridad en la circulación de los trenes.
El servicio se reanudará con los 13 trenes que quedaron en ese tramo de la línea, otros 16 trenes están en los talleres de la terminal Tláhuac y adelantó que en unas semanas se hará la reconexión en el viaducto elevado para poder intercambiar los trenes en operación.
Explicó que en tanto se dio mantenimiento permanentemente a los 13 trenes que ya circulan en vacío en vacío en el tramo reforzado, al interior de las fosas en Mixcoac.
Calderón dijo que antes de la suspensión del servicio se tenía una afluencia de 170 mil usuarios que es el estimado que se tiene previsto atender, o más, al reabrir la línea.
Precisó que el estimado del recorrido es de 20 minutos con un intervalo en el paso de un tren a otro de 3 minutos y 15 segundos e instó a los usuarios a tomar previsiones el domingo y sobre todo el martes al recordar que el acceso en la línea es únicamente con la tarjeta de Movilidad Integrada.
Lajous refirió que se mantendrá la misma flota de 150 autobuses de la Red de Transporte Público (RTP) para el apoyo en el servicio a la terminal de Tláhuac, que sólo dejará de hacer el recorrido que corresponde al tramo en operación del Metro de Mixcoac a Atlalilco.
Calderón expuso que entre las acciones que se realizaron para rehabilitar y reforzar el tramo subterráneo de la línea se sustituyeron más de 2 mil metros cúbicos se balasto, así como 15 mil durmientes por otros de mayor dureza, se construyó una loza de concreto sobre el que se colocó el balasto y se sustituyeron los rieles en el cien por ciento de las curvas por otros de mayor resistencia y durabilidad ante los esfuerzos mecánicos provocados por el tren.
Aclaró que la verificación en el correcto funcionamiento de los trenes se determinó con los nuevos materiales y el costo de los trabajos se realizó con aportaciones de las empresas que participaron en su construcción a excepción de la contratación de las empresas que hicieron la supervisión de obra y las evaluaciones de seguridad, pagadas por el gobierno de la ciudad.