
El vocero de la bancada del Movimiento de Regeneración Nacional (Morena) en la Cámara de Diputados, Arturo Ávila Anaya, salió a defenderse ante las acusaciones en su contra lanzadas por integrantes del Partido Acción Nacional (PAN).
El congresista dijo que el amago con pedir la creación de una comisión especial que lo investigue a él, a sus empresas, los contratos públicos que recibió y hasta presuntos lazos con figuras políticas supuestamente vinculadas con el crimen organizado, no surtirá efecto.
Es parte de una campaña negra de ataques en su contra que la oposición ya le había advertido, en especial desde el PAN, lanzaría.
Afirmó que es el líder nacional del blanquiazul, Jorge Romero, el que manda a congresistas federales de esa fracción a amenazar y pedirle que “le baje” y pare la comisión investigadora de la corrupción inmobiliaria en la Ciudad de México que promueve.
Al responder, se refirió de manera despectiva a la diputada por el PAN, María Elena Pérez-Jaén, a quien minimizó por ser legisladora suplente.
“Bien me dijeron los emisarios del cártel inmobiliario, ¡perdón, del Partido Acción Nacional¡, si tú le sigues rascando, Arturo Ávila, al tema del cártel inmobiliario vamos a empezar con una campaña negra contra ti. (Jorge) Triana, Héctor Saúl Téllez si no me equivoco y la exdiputada suplente de la gobernadora de Aguascalientes, María Elena Pérez-Jaén Zermeño, cumplieron la amenaza porque yo no estoy aquí planteando dichos, yo estoy planteando delitos graves cometidos por Jorge Romero”, reviró.
También se refirió como “payasos” al exlegislador Triana Tena y al diputado Téllez Hernández.
Insistió en que no dará un paso atrás en su intención de crear una comisión investigadora de lo que calificó como “el cártel inmobiliario” del PAN en la capital del país, respecto al que existen 22 carpetas de investigación en la Fiscalía General de Justicia de la Ciudad de México.
También amagó con estar presentando semana a semana, información sobre las presuntas anomalías que involucran al dirigente y otros liderazgos panistas.
Retó al panista Romero Herrera que le compruebe que una de sus empresas vendió el sistema de espionaje “Galileo” a la Defensa.
Si lo logra, ofreció separarse del cargo como diputado federal, de lo contrario, que el dirigente renuncie a su partido, planteó.
En cuanto a su relación con el coordinador de los senadores de Morena, Adán Augusto López al que según los panistas lo unen vínculos criminales, por haber sido su coordinador de campaña en la contienda interna en Morena, para las elecciones del 2024, el morenista también respondió.
Al intentar negar cercanía con López Hernández, aseguró que lo conoció apenas en 2022, por lo que su relación es “corta”.
Rechazó que sus empresas tengan o hayan tenido algún vínculo con la organización criminal “La Barredora”, fundada por el que fuera secretario de seguridad del entonces gobernador de Tabasco, Adán Augusto.
Insistió en que no tiene grandes lazos con López Hernández, que si bien lo invitó a ser su coordinador de campaña, no son muy cercanos.
Al revirar a los panistas y calificar como “mentiras” y “mentiras a medias” lo dicho en su contra, aceptó que la información a partir de la cual lo señalan ya era del conocimiento público. ”No hay nada nuevo”, manifestó.
También admitió que en algún momento las empresas con las que estuvo ligado, sí enfrentaron los litigios que mencionaron los panistas, pero no son casos recientes y todos están concluidos.
“Y obviamente las empresas tienen litigios, naturalmente tienen litigios, ¿no?. 22 litigios que están mostrando que ha habido históricos, históricos desde hace más de 20 años, cerrados, concluidos, y los presentan como 22 investigaciones… ¡no es cierto, hombre, y es que además se les cae la mentira! A ver, son juicios históricos relacionados con empresas donde a lo mejor yo también fui apoderado legal en algún momento, pues sí, históricos”, dijo en el intento de restar importancia a los señalamientos.
Los panistas denunciaron que el parlamentario de Morena forma pate de “una red de corrupción” y tráfico de influencias desde instancias del Gobierno Federal que dieron contratos a empresas donde él y algunos de sus familiares participan o participaban.
Hablaron de contratos con la Secretaría de la Defensa (SEDENA), el Aeropuerto Internacional de la Ciudad de México, el Banco del Bienestar y el organismo Segalmex, aunado a que algunas de las empresas de las que formó parte fueron inhabilitadas por la autoridad federal y señaladas por incumplimientos de contrato y cobros a sobreprecio.
Reconoció que hubo casos de inhabilitación a algunos de los consorcios en los que participó, pero las sanciones se impugnaron y se ganó en tribunales, dijo.
Aseguró que, si en el país hubo algún “narcogobierno” y lazos entre funcionarios públicos y la criminalidad, fue con el panista Felipe Calderón.
Quieren criminalizar a un empresario que sí vendió vehículos a fuerzas armadas y también obtuvo contratos en el área militar del gobierno de Nayib Bukele en El Salvador, pero lo hizo a través de una empresa reconocida formalmente por el gobierno de Estados Unidos, confirmó.