Durante su conferencia mañanera de este miércoles, Claudia Sheinbaum Pardo, aclaró que la propuesta del Instituto del Fondo Nacional de la Vivienda para los Trabajadores (Infonavit) sobre regularizar viviendas invadidas no implica, bajo ninguna circunstancia, despojar a sus legítimos propietarios ni vulnerar la propiedad privada.
“Que no haya malas interpretaciones: constitucionalmente la propiedad privada está resguardada”, subrayó la primera mandataria.
Sheinbaum explicó que actualmente se realiza un censo para conocer el estatus de cada una de las cerca de 800,000 viviendas abandonadas en el país. Estas propiedades fueron construidas durante gobiernos anteriores en zonas alejadas, sin servicios y en condiciones que propiciaron el abandono por parte de los trabajadores, o bien, su ocupación irregular.
Señaló que el abandono masivo de viviendas es resultado de prácticas fraudulentas y erróneas, cuando se construyeron desarrollos habitacionales sin tomar en cuenta la cercanía a centros de trabajo ni condiciones mínimas de habitabilidad.
“Muchas de esas viviendas fueron vendidas hasta cinco veces, lo que generó fraudes. En otros casos, los trabajadores las dejaron porque estaban demasiado lejos y no podían rentarlas”, explicó. Agregó que el gobierno ya ha destinado miles de millones de pesos en intentos fallidos por recuperar esas propiedades a través de despachos externos.
El director del Infonavit, Octavio Romero Oropeza, detalló recientemente que el instituto planea lanzar un programa que permitirá a ocupantes irregulares rentar con opción a compra estas viviendas, incluso si no son derechohabientes. Hasta ahora, se han censado 168 mil viviendas “emproblemadas”, de las cuales 145 mil están ocupadas irregularmente y 23 mil están vandalizadas o en abandono total.
“Si hay ocupantes irregulares, no los vamos a desalojar, pero se les advertirá que, si no se regularizan, nunca podrán ser dueños”, dijo Romero. También afirmó que los dueños originales que abandonaron las viviendas debido a créditos impagables o malas condiciones también recibirán atención para encontrar una solución justa. Sheinbaum reiteró que cualquier acción se hará con pleno respeto a la legalidad y los derechos de los trabajadores. El objetivo del censo es definir claramente la situación jurídica de cada inmueble y tomar decisiones informadas.
“No se trata de cerrar los ojos. Tenemos 800 mil viviendas construidas que, en su mayoría, no están ocupadas. No podemos ignorar esa realidad”, sostuvo desde Palacio Nacional. Finalmente, recordó que su gobierno proyecta construir más de un millón de viviendas nuevas durante el sexenio, por lo que es indispensable resolver el problema habitacional ya existente.
