
El primer ministro de Japón, Shigeru Ishiba, descartó este lunes poner fin al acuerdo comercial que el país mantiene con Estados Unidos pero alertó de las “incongruencias” de la política arancelaria de la Administración del presidente estadounidense, Donald Trump, que afecta especialmente a la industria automovilística.
Así se refirió al pacto comercial alcanzado entre las partes en 2019, cuando Trump era también presidente. Dicho pacto reducía los gravámenes para la importación de productos agrícolas procedentes de Estados Unidos y permitía a Tokio sortear un aumento de los aranceles.
A pesar de que las partes acordaron entonces que estas tarifas no aumentarían de cara al futuro, el Gobierno japonés no se ha visto exento de las políticas arancelarias de la nueva Administración Trump, que ha aplicado unos aranceles del 24% a todas las importaciones de la industria automovilística.
“Japón está muy preocupado por la falta de consistencia sobre este asunto, teniendo en cuenta el acuerdo bilaterales de 2019”, aseveró Ishiba en un discurso ante el Parlamento japonés.
“Vamos a seguir defendiendo nuestra postura”, aclaró antes de resaltar que no tiene intención de poner fin al acuerdo en cuestión.
Está previsto que el ministro de Finanzas japonés, Katsunobu Kato, visite Washington a finales de esta semana para mantener conversaciones sobre este asunto con las autoridades estadounidenses. Allí se reunirá con el secretario del Tesoro, Scott Bessent, al que trasladará sus preocupaciones.