Estados Unidos y sus aliados Japón y Corea del Sur condenaron el jueves en una declaración conjunta los últimos lanzamientos de misiles norcoreanos.
“Estos disparos constituyen una clara violación de múltiples resoluciones del Consejo de Seguridad de las Naciones Unidas y demuestran la amenaza que las armas ilegales de destrucción masiva y los programas de misiles balísticos (de Corea del Norte) representan para la región”, afirma el comunicado.
Corea del Norte disparó el jueves dos misiles que cayeron en la zona económica exclusiva de Japón tras advertir que habría “inevitablemente” una respuesta a maniobras conjuntas emprendidas por Estados Unidos y Corea del Sur.
La declaración trilateral reflejó el creciente deshielo entre Japón y Corea del Sur, uno de los principales objetivos de política exterior de Washington, que refuerza sus alianzas en una región puesta a prueba por Corea del Norte y la expansionista China.
“Estados Unidos reafirma inequívocamente sus firmes compromisos de seguridad con Japón y la República de Corea”, como se denomina oficialmente Corea del Sur, dice el comunicado.