La inflación en México tuvo una ligera desaceleración en la primera quincena de marzo, relevaron los datos publicados por el Instituto Nacional de Estadística y Geografía (INEGI) este jueves.
El indicador de la inflación se ubicó en 7.12 por ciento anual en este periodo.
Algunos productos y alimentos, así como servicios, presentaron una mayor baja en sus precios en la primera quincena de marzo.
Los datos del INEGI indican que los nopales y los jitomates son los productos que más bajaron de precio en esta temporada.
Así es como se comportó la variación de precios a la baja:
Nopales (14.40 por ciento)
Jitomate (4.75 por ciento)
Lechuga y col (4.61 por ciento)
Huevo (1.15 por ciento)
Pollo (1.13 por ciento)
Carne de cerdo (0.98 por ciento)
El kilo de nopales tiene un precio de 33 pesos en el Valle de México, según datos de Profeco actualizados al 15 de marzo.
Y el kilo de jitomate tiene un precio de 19.63 pesos en el caso del huaje o saladette. El jitomate bola tiene un costo de 24.30 pesos por kilo en promedio.
En el mismo periodo, el pollo entero tiene un costo de hasta 47 pesos, y la pechuga de pollo tiene un precio de 92 pesos el kilo, con datos actualizados al 15 de marzo.
También el gas doméstico LP bajó, con una variación de 2.43 por ciento.
Por el contrario, los productos alimenticios que más subieron de precio fueron:
Limón (15.29 por ciento)
Papa y otros tubérculos (2.48 por ciento)
Tortilla de maíz (0.7 por ciento)
Leche pasteurizada y fresca (0.6 por ciento)
Así se encuentra la inflación en marzo
La inflación en México ha ligado cuatro quincenas a la baja. Sin embargo, todavía se encuentra por encima del rango objetivo del Banco de México, que es de 3 por ciento +/- un punto porcentual.
En las dos primeras semanas de marzo, la inflación tocó 7.12 por ciento. El indicador subió 0.15 por ciento en esa quincena, en comparación con la quincena inmediata anterior.
La subgobernadora del Banxico, Irene Espinosa, ha advertido que la institución tendrá que subir otra vez su tasa de interés para controlar la inflación en el país.
Esto se debe a que la inflación subyacente, que excluye los precios de alimentos y energéticos por su volatilidad, ha sido muy resistente a caer, explicó la funcionaria el miércoles.
“Está claro que las fuentes de presión inflacionaria están ahí y existe la necesidad de un esfuerzo monetario adicional”, consideró.
El Banxico ha dicho que el crecimiento económico puede verse obstaculizado por la inflación, que sigue siendo una de sus preocupaciones.