El Índice Nacional de Precios al Consumidor (INPC) registró una variación anual de 8.7 por ciento en septiembre, nivel igual al observado en agosto, de acuerdo con el informe del Instituto Nacional de Estadística y Geografía (Inegi) publicado este viernes.
Los precios se vieron presionados por el aumento en el precio del jitomate, loncherías, fondas, torterías y taquerías, cebolla, tortilla de maíz y electricidad.
Dicho resultado se da luego de presentar una variación de 8.70 por ciento en agosto y 8.15 por ciento en julio
Así, la inflación se ha ubicado 19 meses consecutivos por encima del rango objetivo fijado por el Banco de México (3 por ciento, +/- un punto porcentual).
l resultado del INPC estuvo ligeramente por debajo de las expectativas del mercado, el cual estimaba 8.74 por ciento a tasa anual, de acuerdo con Citibanamex.
“La inflación parece cumplir el posible pico tan deseado por las autoridades, al alcanzar la ilusión aritmética de posiblemente haber llegado a su máximo. La general se mantiene en 8.70 por ciento, mientras la subyacente sigue desafiando a las autoridades al subir a 8.28 por ciento”, comentó Alfredo Coutiño, director de Moody’s Analytics, comentó en su cuenta de Twitter.
“No hay que descartar euforia prematura en Banxico. La inflación estructural continúa bajo presión y la corrección del peso aún no ha llegado. Sería ingenuo empezar a bajar la guardia anti-inflacionaria, sobre todo en un ambiente monetario agresivo en los EU”, agregó.
El índice de precios subyacente, que es aquel que excluye de su contabilidad los productos de alta volatilidad de precios, nuevamente escaló y se ubicó en 8.28 por ciento a tasa anual, su variación más alta desde septiembre del 2000, cuando subió a 8.32 por ciento.
En su interior, los precios de los servicios se ubicaron en 5.35 por ciento, mientras que el alza en los precios de las mercancías fue de 10.84 por ciento.
En tanto, la balanza no subyacente, que contabiliza los productos que presentan una alta volatilidad en sus precios, como los productos agrícolas o los combustibles, desaceleró y se ubicó en 9.96 por ciento a tasa anual.
De manera desagregada, los precios de los productos agropecuarios presentaron una variación de 15.05 por ciento, mientras que la de los de los energéticos y tarifas autorizadas por el Gobierno se ubicó en 5.88 por ciento, esto respecto al mismo periodo del año pasado.
Por su parte, el Índice de Precios de la Canasta de Consumo Mínimo aumentó a tasa mensual 0.77 por ciento y anual, 9.6 por ciento.
En su comparación respecto al mes anterior, el INPC desaceleró a 0.62 por ciento, su variación más baja desde abril de este año.
Entre los productos genéricos cuyas variaciones de precios destacaron por su incidencia sobre la inflación general fueron el jitomate (11.63 por ciento); loncherías, fondas, torterías y taquerías (1.01 por ciento); cebolla (11.37 por ciento); tortilla de maíz (2.09 por ciento) y electricidad (2.02 por ciento).
Por el contrario, el producto que presentó una disminución en su precio fue principalmente el gas doméstico LP (3.31 por ciento); aguacate (16.35 por ciento); servicio de telefonía móvil (3.97por ciento); servicios profesionales (14.61 por ciento) y gasolina de bajo octanaje (0.56 por ciento).