Los problemas a pasajeros y que aterrizan en el Aeropuerto Internacional Felpe Ángeles (AIFA), empiezan a salir a la luz y el principal es el traslado de esta Terminal aérea a cualquier sitio de la Ciudad de México o su periferia.
La falta de transporte, por la s pocas vías de comunicación hacia este aeropuerto hace que la problemática se convierta también en económica.
La disposición de taxis se reduce porque tampoco existe mucho pasaje para ellos, lo que convierte esta demanda en precios elevados que van desde los 600 pesos hasta los mil 200 pesos
El horario restringido de los autobuses es otro problema por lo que otra alternativa como lo es el Mexibus, también se convierte en un problema máxime si se viaja con varias maletas.
De acuerdo a las empleadas de una de las líneas de taxis que operan en el aeropuerto, las 37 unidades con las que cuentan a veces resultan insuficientes cuando se les juntan los usuarios, quienes “muchas veces se enojan si no hay carro y tienen que esperar”.
Pero más insuficientes aún resultan otras dos líneas de autos de alquiler, que tienen apenas cinco y seis vehículos, respectivamente, mientras otras de plano brillan por su ausencia y no ponen personal en sus mostradores, donde todavía no parecen contar con luz, Internet ni mobiliario.
En los primeros días de funcionamiento del AIFA, tampoco hay bancos ni cajeros automáticos disponibles, lo cual significa un problema para los viajeros porque muchos servicios se pagan sólo en efectivo o por transferencia electrónica. Además, sigue sin haber lugares para comer.