Una investigación interna sobre un total de 16 fiestas celebradas durante los confinamientos de 2020 y 2021 en Downing Street denunció el lunes “fallos de liderazgo y juicio” en las oficinas del primer ministro británico, Boris Johnson.
“Hubo fallos de liderazgo y juicio por diferentes partes en Downing Street y en la Oficina del Gabinete en diferentes momentos. Algunos eventos no deberían haberse permitido”, concluyó la alta funcionaria Sue Gray en un informe entregado a Johnson, quien debe responder este mismo lunes.
Johnson recibió las conclusiones de una investigación sobre fiestas organizadas por el gobierno a pesar del confinamiento sanitario ordenado por la crisis del coronavirus, informaron autoridades el lunes, pero los hallazgos en tornos a las acusaciones más severas siguen en reserva mientras la investigación policial sigue su curso.
El primer ministro británico afirmó el lunes ante el Parlamento “lamentar” una serie de fiestas celebradas en Downing Street durante los confinamientos, señaladas en una muy crítica investigación interna y prometió aprender las lecciones y seguir trabajando.
“Lo entiendo y lo arreglaré”, aseguró, prometiendo cambios administrativos en Downing Street. “Sé cuál es la pregunta: ‘¿se puede confiar en que este gobierno cumpla?'”, reconoció. “Sí se puede”, afirmó defendiendo su labor a favor del Brexit y contra el coronavirus.
La Oficina del Gabinete informó que la funcionaria civil Sue Gray “ha entregado una actualización sobre sus investigaciones al primer ministro”.
Pero la “actualización” probablemente no lo dirá todo sobre las denuncias que han estremecido al gobierno de Johnson. Algunas de las conclusiones de Gray están bajo reserva a solicitud de la policía, que ha lanzado una investigación aparte sobre si algunas de las fiestas violaron las normas por el covid-19.
Las acusaciones han provocado descontento popular, llamados a que Johnson renuncie incluso por parte de parlamentarios de su propio partido y pugnas internas en el partido de gobierno.
Johnson niega haber cometido ilegalidad alguna y ha dicho que no tiene “la más mínima intención” de renunciar.
Pero su control sobre el poder se ha visto debilitado por denuncias de que él y sus asesores violaron las estrictas restricciones que le impusieron al país en 2020 y 2021, con fiestas con bebidas alcohólicas, fiestas de cumpleaños y “viernes con vino”.